Cualquiera de nosotros, en nuestra juventud, alguna vez aplastamos algunas hormigas en el suelo de la cocina. Pero ahora que estamos crecidos ya no podemos estar al tanto de cada insecto que se nos presenta en nuestro hogar.
Es así que buscamos, y encontramos, un par de soluciones naturales para prevenir problemas domésticos de este tipo. Preferimos utilizar recursos naturales en lugar de contaminantes plaguicidas tóxicos:
El uso de esencias fuertes, como el limón, naranja, clavo, menta y pimienta en el hogar disuadirá a la mayoría de los “bichos”, debido a que estos huyen de los fuertes olores.
Ajo y pimienta: El ajo y la pimienta en polvo también funcionan como repelente para insectos. Por lo tanto, rociando el polvo alrededor de las áreas clave del hogar ayudará a mantener lejos a los insectos.
Pepinos: Cuando se acerca el verano, las hormigas acuden a las cocinas a “cazar” las migajas de la comida. Las hormigas odian el pepino, por lo tanto las rodajas de esta verdura son más efectivas cuando se colocan cerca de grietas u otras áreas donde los insectos pueden entrar a la casa.
La menta contra las moscas: Pequeños paquetes de menta triturada realmente ayudan a mantener las moscas lejos de nosotros, además de que su aroma es exquisito.
Cáscaras de limón para las polillas. A casi todos nos encanta el aroma de los cítricos, y el limón es uno de los preferidos. Colocándolos en áreas estratégicas de nuestro guardarropa evitaremos la molestia de las polillas, además de cuidar nuestras prendas de estos hambrientos y sumamente dañinos animalillos.