Un rápido artículo para comentaros algo nuevo en mi habitación de costura. Encontré estos pequeñitos pajaritos en una de las floristerías de la ciudad y ya están cantando mientras trabajo.
Primero los coloqué con cinta fuerte de doble cara. No dio resultado. Opté por un poco de pegamento caliente.... y ahí están, quietecitos quietecitos.
Dejé caer unos madroños y ¡ ale , un cambio a la estantería!
Hay que ver qué cosa más tonta y lo que cambia este rincón. Cuando me canse.... pues otra, mariposa.